Es temporada alta de turismo en Mallorca, y junto con los veraneantes que vuelan para disfrutar del sol, el mar, la cultura y el nuevo hotel Son Bunyola de Richard Branson, hay más gente buscando casa.
Los precios también suben. Los precios de primera línea subieron un 15% hasta junio de 2023, según un estudio de la consultora inmobiliaria Savills, que sitúa a Mallorca entre los cinco primeros puestos de su clasificación de lugares para segundas residencias. Savills tiene en cuenta el coste entre otros factores como la calidad de vida, la conectividad con el aeropuerto y la oferta de restaurantes y hoteles de alta gama, en los que Mallorca obtiene una alta puntuación.
El precio medio de venta en Port Andratx, en el suroeste de la isla, fue de aproximadamente 5 millones de euros (5,46 millones de dólares) en 2022, frente a los 4,5 millones de euros del año anterior, según Engel & Völkers. Las casas de campo y las fincas cerca del popular pueblo de Deya, donde se encuentra un hotel de Belmond, han visto aumentar los precios hasta los 4 millones de euros, frente a los 3 millones del año anterior.
Este auge de los precios ha hecho que la vivienda sea más inasequible para la población local. Los extranjeros compraron alrededor del 36% de las viviendas vendidas en Mallorca y las islas vecinas en el cuarto trimestre de 2022, y los precios de la vivienda en Baleares son ahora los más altos de todas las regiones españolas. España es ahora uno de los principales destinos mundiales para particulares con patrimonios muy elevados, lo que también está impulsando los precios al alza, según un análisis de Knight Frank.
Según datos de idealista, Baleares se reafirma como la provincia más cara para adquirir una vivienda (3.973 euros/m2), por delante de Guipúzcoa (3.422 euros/m2). Les siguen Madrid (3.143 euros/m2), Málaga (2.964 euros/m2), Vizcaya (2.732 euros/m2) y Barcelona (2.687 euros/m2).
El aterrizaje del vuelo directo de Nueva York a Palma de la compañía United Airlines el verano pasado ha llevado a la isla un tipo de cliente de alto poder adquisitivo y procedente de EEUU. Aunque la mayoría de los compradores extranjeros son alemanes, británicos y franceses, el peso de los americanos cada vez es mayor. Además, el tipo de cambio entre el euro y el dólar es favorable para los compradores de EEUU.
Charlie Hill, cofundador de la inmobiliaria Charles Marlow, afirma a Bloomberg que casi el 50% de los clientes proceden ahora de EE UU. «El mercado estadounidense ha pasado de ser un visitante o comprador ocasional a convertirse en algo habitual», afirma. Este verano está gestionando un número récord de visitas, entre ellas la de un comprador neoyorquino que quiere comprar un antiguo hotel para trasladarse a Mallorca con su familia.
Los foráneos no sólo buscan una casa para pasar las vacaciones, también para disfrutar todo el año. Y es que hay muchos nómadas digitales.
La política española de visados para nómadas digitales, que se puso en marcha a principios de 2023, permite a los trabajadores a distancia con unos ingresos de 2.334 euros al mes residir en el país durante cinco años y luego solicitar el estatus permanente. Ofrece a los estadounidenses la oportunidad de vivir en la isla española, pero para los británicos funciona como una solución a las restricciones impuestas por el Brexit que entraron en vigor en 2021.